¿Sabías que los primeros aceites utilizados para motor los extraían de grasas animales y vegetales?
A medida que avanzó la técnica y las exigencias, se comenzaron a usar los compuestos químicos derivados del petróleo de mayor calidad y acorde con las necesidades industriales en ese momento.
Estos aceites que consisten principalmente en la composición de hidrocarburos y compuestos orgánicos de carbono e hidrógeno, llevan añadidos diferentes aditivos de avanzada tecnología para mejorar sus cualidades.
En ese sentido, te presentamos 5 principales funciones del aceite para tu motor:
Lubrica: El aceite permite el movimiento suave de las piezas, reduciendo la fricción y el desgaste.
Limpia: El aceite recoge y dispersa el hollín, lodo, impurezas, etc., permitiendo la limpieza de las partes internas del motor.
Sella: El aceite llena cualquier espacio vacío, impidiendo la liberación de gases de la cámara de combustión, evitando la perdida de potencia.
Enfría: El aceite absorbe el calor, ayudando a la prevención del sobrecalentamiento de las partes.
Antioxidante: Ayuda a prevenir la formación de polvo rojizo en los metales generado por el ataque del agua, también es conocido como herrumbre. De igual forma se puede prevenir la corrosión que es el ataque directo de los ácidos a las partes metálicas y no metálicas del motor.
Recuerda que el uso del aceite es indispensable para que el motor siga funcionando correctamente y sin problemas.
ENEOS es tecnología japonesa que ayuda al motor de tu vehículo a mantenerse limpio y en óptimas condiciones para incrementar su durabilidad, obtener su máximo rendimiento y evitar el desgaste.
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